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Mostrando entradas de enero, 2024

Mortifica tu orgullo

El mal, causa de grandes males, llamado orgullo es un terrible arrogante que debemos mortificar cada día para que perezca en su vanidad. No es el mayor peligro de un cristiano su ignorancia sino su orgullo, porque la ignorancia puede ser resuelta en la humildad, pero quien vive en orgullo cae en una gran trampa en la que difícilmente escapara a menos que se humille a si mismo ante Dios, mortificando de esta manera su terrible orgullo. “Haced morir, pues, lo terrenal en vosotros…” Colosenses 3: 5 (RVR 1960) Lo terrenal en nosotros es todo aquello que procede de este gran mal llamado orgullo: fornicación, impureza, pasiones desordenadas, malos deseos y avaricia. Todo el mal que puede un hombre cometer es el resultado de un corazón orgulloso que no se somete a Dios. No hay sensatez en el orgulloso sino solo vanidad, aunque aparentemente no se vea como tal. La arrogancia, aunque sea por causas aparentemente justas, es un mal del que debemos morir a diario, reconociendo aun en nuest

LA LUCHA POR LA VERDAD

  La lucha por la Verdad define nuestra Eternidad, con esto quiero decir que defender la Verdad es relevante en nuestra humanidad, mucho más importante de lo que creemos, de tal manera que morirán muchos en el infierno por la eternidad, por no creer en la Verdad, prefiriendo vivir en la mentira de sus religiones falsas que han inventado antes que reconocer su pecado y volverse en arrepentimiento ante el Señor. Por lo tanto, como cristiano, defiende la Verdad, estudia la Biblia con mucha profundidad porque es en la Biblia que podemos comprender, entender y amar la Verdad y solo el Maestro nos enseñara lo que significa la Verdad. “Dijo entonces Jesús a los judíos que habían creído en él: Si vosotros permaneciereis en mi palabra, seréis verdaderamente mis discípulos; y conoceréis la verdad, y la verdad os hará libres.” Juan 8: 31-32 (RVR 1960) “Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la verdad, y la vida; nadie viene al Padre, sino por mí.” Juan 14: 6 (RVR 1960) La Verdad es la Palabra

EN MOMENTOS DE CAMBIOS

  Las transiciones a nuevos cambios no siempre son fáciles de asimilar, aunque sean buenas, porque ingresar a nuevas experiencias, rutinas, estilos de vida, entre otras, causa un poco de incertidumbre, tristeza o quizás desesperación por no estar en un lugar de confort o conocido, por lo que se hace necesario no solo asimilar esta situación sino aprender a sobrellevarla de una manera Bíblica, confiando en el Señor de tal manera que pueda convertirse en un aprendizaje eficaz para nuestra vida que nos guie a la confianza absoluta en el Señor como nuestro lugar más seguro. “Declaro lo siguiente acerca del SEÑOR: Solo él es mi refugio, mi lugar seguro; él es mi Dios y en él confío. Te rescatará de toda trampa y te protegerá de enfermedades mortales. Con sus plumas te cubrirá y con sus alas te dará refugio. Sus fieles promesas son tu armadura y tu protección.” Salmo 91: 2-4 (NTV) Dios es nuestro refugio, lugar más seguro, nuestro Dios en quien debemos confiar, solo en El podremos estar