JUVENTUD MÁS QUE VENCEDORA

  La paciencia es una virtud que se aprende con el tiempo y es muy necesaria en el servicio a Dios, porque en la paciencia somos formados y podemos tener buenos frutos.   “Con vuestra paciencia ganaréis vuestras almas” Lucas 21: 19 (RVR 1960)   No nos cansemos de predicar la Palabra, sino anunciemos con gozo del Señor, aun cuando los tiempos parezcan ser los más malos, porque es en la paciencia que hay formación. La paciencia que tengamos debe ser día a día mayor, porque es parte fundamental de la madurez y es necesaria para seguir fielmente la voluntad de Dios, así mismo para ganar almas, porque en un discipulado no solo se requiere conocimiento sino ser paciente con las personas, en oración y predicación, primeramente con la familia, porque la primera misión está en la casa, con los hijos, hermanos o padres.  

La ley nos prohíbe realizar ciertas acciones que podemos cometer, para evitar hacerle daño a alguien o a uno mismo, pero principalmente la Ley de Dios nos enseña de Dios, porque su Ley nos indica lo que quiere de nosotros, que más que sacrificios es obediencia.   “Y Samuel dijo: ¿Se complace el Señor tanto en holocaustos y sacrificios como en la obediencia a la voz del Señor? He aquí, el obedecer es mejor que un sacrificio, y el prestar atención, que la grosura de los carneros.” 1 Samuel 15: 22 (LBLA)   Pero la obediencia a la Ley de Dios no es posible en un corazón orgulloso, sometido al pecado, y en esa condición por naturaleza estamos todos desde nuestro nacimiento, por lo tanto la Ley de Dios también nos enseña nuestra condición miserable y necesidad absoluta de Jesucristo.   “Dicho de otra manera, la ley fue nuestra tutora hasta que vino Cristo; nos protegió hasta que se nos declarara justos ante Dios por medio de la fe. Y ahora que ha llegado el camino de la fe, ya

Muchos creen y aun enseñan que el Espíritu Santo puede dejar de habitar en el cristiano cuando hace algo malo, pero esta doctrina es humanista y no bíblica pues cree que por las obras el cristiano es salvo y por la misma razón puede perder su salvación, pero la Obra de Salvación es únicamente de Dios y la perseverancia de los santos en la fe en Jesucristo es Obra de Dios que evidencia si han o no han nacido de nuevo.   “estando convencido precisamente de esto: que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Cristo Jesús.” Filipenses 1: 6 (LBLA)   “En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa, que es las arras de nuestra herencia hasta la redención de la posesión adquirida, para alabanza de su gloria.” Efesios 1: 13-14 (RVR 1960)   Si una persona dijo creer en Jesucristo y después manifiesta que ya no cree, no es qu

“Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús.” Filipenses 4: 7 (RVR 1960)   Sobre el significado de paz muchos han dado sus conceptos, el concepto más popular se refiere a un lugar tranquilo en donde todos tengan lo necesario y disfruten de la naturaleza, pero otros hablan de algo mucho mejor y es una paz que se ha formado desde el interior.   La paz verdadera no la ofrece este mundo sino solo Dios, no desde nuestro ambiente sino desde nuestro corazón, porque a Dios le interesa formar nuestra vida primeramente, por lo que aquellos que hablan de un evangelio que promete riquezas, fama o algún otro cumplimiento de su vano deseo están más cercanos al cuento de Aladino y su lámpara maravillosa que a la realidad y verdad de las Escrituras.   Las personas que han crecido con una idea errónea de la paz, verdaderamente no tienen paz, porque la paz que ofrece el mundo es cambiante, porque las circunstancia

    “Entonces Dios habló todas estas palabras diciendo: «Yo soy el Señor tu Dios, que te saqué de la tierra de Egipto, de la casa de servidumbre. No tendrás otros dioses delante de Mí.” Éxodo 20: 1-3 (NBLA)   El primer principio del llamado decálogo o diez mandamientos es una clara prohibición a la idolatría, la idolatría se refiere a una adoración a algo o a alguien que no es Dios. Dios no acepta reverencia, adoración, veneración, culto o devoción sino solamente a Él, por lo tanto es necesario conocer en primer lugar quien es Dios.   Dios es Padre, Hijo y Espíritu Santo, Tres Personas y Un Solo Dios, La Trinidad, el Creador de todo el universo, el Principio y el Fin, el Soberano Redentor, el Dador de Vida, Conocer de todo, Omnipotente, Presente en todo lugar, Compasivo, entre otros infinitos más atributos que quedarían cortos para enseñarnos de Dios, pero la Biblia nos revela la voluntad de Dios para nuestras vidas como seres humanos y en los diez mandamientos que ha