DEJEMOS DE SER TAN EGOÍSTAS
Antes de tomar una decisión piensa: eso que quiero
hacer con el otro ¿me gustaría que me lo hicieran a mí? Si este fuera uno de
los puntos reflexivos en el momento previo a la acción muy probablemente como
sociedad no tendríamos tantos problemas como el bullyng, el aborto, el acoso,
el robo, entre otros, pero por lo general no se piensa en lo anterior por el
egoísmo en el que se encuentra enclaustrado cada ser humano.
“Pedís, y no recibís, porque pedís mal, para gastar en
vuestros deleites.” Santiago 4: 3 (RVR 1960)
Es necesario que nos hagamos un examen aun en nuestras
oraciones, porque muchas de ellas están cargadas de egoísmo y banalidad, por lo
que es necesario arrepentirnos, dejar de vivir pensando solo en nosotros
levantar nuestro rostro al cielo y clamar a Dios como lo hizo el salmista:
“Muéstrame, oh Jehová, tus caminos; Enséñame tus
sendas.” Salmo 25: 4 (RVR 1960)
No se tratan de nuestros camino sino de Sus caminos, no
son nuestros pensamientos los que nos debieran guiar sino Sus pensamientos,
porque Jesucristo es el mejor sendero que podemos transitar en donde el egoísmo
es reemplazado por el amor, por lo tanto dejemos todo egoísmo y refugiémonos en
el Señor y en Su bendita Palabra día y noche.
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