HUYE PUES DE LAS PASIONES JUVENILES

 

Dios no nos ha dado espíritu de cobardía sino de poder, de amor y de dominio propio, como nos enseña 2 Timoteo 1, por lo que huir de las pasiones juveniles no es de cobardes sino de valientes, porque existen lugares, objetos o aun personas de las que son mejor alejarnos por nuestro propio bien, es parte del autocuidado, el cual es bueno y no egoísta, el mismo Señor dice:

 

“Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; porque de él mana la vida.” Proverbios 4: 23 (RVR 1960)

 

Es necesario para el cuidado de nuestro corazón que nos alejemos de todo aquello que nos quiera tentar a pecar, alejarnos de todo aquello que nos quiera quitar la paz con Dios, como hizo Josué que al ver a la mujer de Potifar coqueteándole y desnuda, se fue, huyó, aunque aquello implicara perder su propio puesto de trabajo y hasta una reputación, por lo anterior alejémonos de todo lo que nos quiera hacer caer y aferrémonos a Cristo.

 

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