LOS INDICATIVOS PRECEDEN A LOS IMPERATIVOS
La Gracia es la base de la obediencia, de la
disciplina y de todo nuestro hacer, porque sin Gracia no es posible seguir el
camino del Señor. Es asi que en la Biblia vemos claramente que los indicativos
preceden a los imperativos, por ejemplo veamos el siguiente versículo:
“Yo pues, preso en el Señor, os ruego que andéis
como es digno de la vocación con que fuisteis llamados” Efesios 4: 1
El pues de Efesios 4: 1 sirve como un puente
literario que inmediatamente nos lleva a lo anterior, porque el versículo es lo
que sigue después de haber dado un mensaje indicativo, por esta razón el pues
es fundamental y con un sentido claro, cuando se enseña lo anterior, de resto
será muy difícil entenderlo. Por lo anterior, primero viene el indicativo y
luego el imperativo y asi tambien debe ser enseñado.
Dios primero derrite nuestro corazón para luego guiarnos
a la obediencia, asi es que debemos en primer lugar hablar de gracia antes de
la ley. En los 10 mandamientos se puede evidenciar esto cuando antes de enseñar
cada mandamiento, Dios le dice a Su pueblo “Y habló Dios todas estas palabras,
diciendo: Yo soy Jehová tu Dios, que te saqué de la tierra de Egipto, de casa
de servidumbre.” (Éxodo 20: 1). Es asi que la base de la ley es la gracia,
antes de enseñar la ley les recordó la gracia de El para liberarlos de la
esclavitud, y asi debemos recordar cada día de nuestro peregrinaje que el por qué
de la obediencia a Dios es la Gracia de Dios, por lo tanto nuestra obediencia a
Dios debe ser una acción de gratitud a Él por todo lo que hizo por nosotros sin
merecerlo.
El motivo de lo que hacemos, de nuestra obediencia
a Dios, debe emanar de un corazón que ama a Dios, porque ha comprendido su
Gracia Irresistible. Es asi que estudiamos, obedecemos, servimos a Dios porque
lo amamos, descansamos en El, disfrutamos Su Palabra, y no para ser mejores, en
otras palabras debemos obedecer a Dios porque somos hijos de Dios y no para ser
hijos de Dios.
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