VOLVAMOS AL COMIENZO
La
moralidad hace referencia a comportamientos que se consideran buenos,
apropiados, correctos. Es la moralidad bíblica la única que nos dice a ciencia
cierta lo que es bueno y es malo. Y aunque por años nos han tergiversado la
Biblia hablándonos de una moralidad antibíblica, dirigida por religiosos o
filósofos, es tiempo de que volvamos al comienzo.
En
el principio estaban solo Adán y Eva, sin pecado, sin delito alguno en su vida,
con una vida totalmente integra, bajo una moral completamente bíblica, pero su
desobediencia a Dios fue el lugar que le dieron al diablo para que los
terminara de destruir porque con el pecado de ellos entró la muerte al mundo.
Ahora sabemos que Jesucristo murió para que ya no vivamos para el mundo sino
dejemos nuestra maldita naturaleza heredada de Adán y Eva a fin de no ser más
esclavos del pecado, del diablo y del mundo. Por medio de la redención que
tenemos en Jesucristo podemos ser regenerados. Regenerado es ser como en el
principio.
Todos
los días somos conscientes del gran bombardeo de nuestros profesores,
compañeros, amigos, conocidos, jefes, medios de comunicación u otros que nos enseñan
una moralidad contemporánea que nos dice que lo bueno es malo y lo malo es
bueno. Es triste escuchar de “iglesias” (pseudoiglesias) que se llaman
cristianas decir que Dios creó a los homosexuales cuando la Biblia nos dice:
“—¿No han leído —replicó Jesús— que en
el principio el Creador “los hizo hombre y mujer”” Mateo 19: 4 (NVI)
Pero
no es esto lo que nos debería preocupar sino lo que nos debería dar más
tristeza es que conociendo la verdad han preferido creerle al mundo.
“¡Ay de los que llaman al mal bien y al bien mal, que
tienen las tinieblas por luz y la luz por tinieblas, que tienen lo amargo por
dulce y lo dulce por amargo!”
Isaías 5: 20 (LBLA)
Es
necesario que volvamos al comienzo, que vayamos a la Biblia para que
reflexionemos en como Dios pensó la humanidad y como ahora nosotros nos hemos
desviados del propósito Divino.