NO NOS ENFOQUEMOS EN LOS PROBLEMAS
El mirar los problemas no nos llevara a ningún buen término. Es como si piloteáramos un avión solo viendo el panorama nublado hacia nuestro destino, eso ocasiona que nos perdamos en cualquier sendero, que la gasolina se acabe y que el avión se caiga por falta de combustible. Así ocurre con nuestra vida cuando nos enfocamos solamente en los problemas. En nuestro caminar habrán muchos momentos nublados donde los problemas querrán distraernos del sendero que estamos transitando, pero no podemos perder la mirada hacia nuestro destino. La humanidad no fue predestinada a las tinieblas y oscuridad sino a estar con el Señor por la eternidad, por lo tanto, es este el camino que no debemos olvidar. El sabio Salomón, con la sabiduría que le dio Dios, escribió: “El que al viento observa, no sembrará; y el que mira a las nubes, no segará.” Eclesiastés 11: 4 (RVR 1960) El mirar las nubes o el viento no hará que las cosechas se mejoren, así como el enfocarnos en los problemas no nos ayud...